La hipótesis de un casco hundido, a 28 metros de profundidad, frente a costas de Lobería, que no figuraba en registros náuticos, se investigó durante casi un año a partir de un conjunto de datos recopilados que convencieron a Prefectura Naval Argentina (PNA) para avanzar con una inspección en el lecho marino.
Por su parte, la agrupación Eslabón Perdido, grupo multidisciplinario que inició el examen de este naufragio, ya confirmó que el pecio encontrado entre las playas de Arenas Verdes y Costa bonita corresponde al casco de un submarino.
Los restos de esa embarcación, muy deteriorada por el paso del tiempo, son compatibles con las de un sumergible que pudo ser parte de la flota alemana que combatió durante la Segunda Guerra Mundial.
Un periscopio, la torreta, escotilla y cubierta, sumados a las extensiones de eslora y manga de la embarcación, coinciden con el perfil de los denominados U-Boot que Adolf Hitler movilizó primero para defensa y combate y luego, según refieren y dan por firme quienes siguieron de cerca los pasos en fuga de algunos de los jerarcas nazis, escapar hacia aguas lejanas que los acercaran a tierras que consideraban refugios seguros.
El punto de naufragio está a unos cuatro kilómetros de la costa, justo frente al sector de playas que marca el límite entre los partidos de Lobería y Necochea.
Coincide con los fondos de la estancia Moro Mar, mismo punto donde –según registros periodísticos de época– pobladores y navegantes habían advertido movimientos de desembarcos en su momento.
Ahora se aguarda el informe definitivo de la LNI (Liga Navale Italiana), especializada en análisis de naufragios durante la Segunda Guerra Mundial, como de peritos argentinos convocados para analizar los registros del relevamiento efectuado hasta el momento.
“Que los submarinos alemanes estuvieron por aquí está confirmado con la presencia del U-530 y U-977 que, en el tramo final de aquellas batallas, se rindieron en la Base Naval de Mar del Plata”, afirmó Basti, con referencia al acontecimiento que se verificó entre junio y agosto de 1945, entre uno y tres meses después de la rendición alemana, como recordó el investigador.
Ilustraciones, capturas de un video elaborado por el grupo Eslabón Perdido